i'm falling...
A veces tenemos un pie ahí... al borde de algo que tan sólo tenemos que rodear, saltar, esquivar. Son obstáculos que nos impiden seguir adelante con nuestras vidas o con lo que sea que queramos hacer, bueno o malo, terrible o peor.
Yo no sé si hubiera pasado la pierna sobre la baranda. Tengo sueños, todavía los conservo. Me gustaría saltar en paracaidas, por ejemplo. Siempre he sido muy tranquilo, pero siempre he vivido al límite. Sí, también he sido muy contradictorio.
Es fácil verlo todo desde arriba. Te asomas tras esos barrotes decorados con un arte demasiado elaborado. Sabes que estás a salvo. Pero también sabes que si te sientas al borde del murito, corres peligro. Puedes caerte, hacerte daño, morir.
Y morirse es una putada para los demás. Para quienes te acompañan en este viaje por el mundo absurdo de las fantasías de otros y tus sueños negados y violados.
Pero aún así, ya digo; me gusta soñar.
No tener pesadillas, como estos últimos meses, en los que cada momento despierto o dormido, en mi mundo real o en el onírico han sido tormentosos. Pero no como esas tormentas en las que te quedas en casa, enciendes la chimenea y oyes la gotera de la cocina mientras la lluvia golpea con fuerza los árboles que rodean tu casa. Es como una tormenta en mitad de un océano y vas subido en una barca pequeña, al descubierto. Es una de esas tormentas en las que deseas hundirte con los pedazos de madera que te mantienen a flote.
Esa es la diferencia entre apoyarte en la barandilla o pasarte al otro lado, balancearte confiando en la fuerza de tus dedos, que se aferran al ladrillo viejo y gastado. Cerrar los ojos y dejarte caer, confiando que alguien te recoja, o que nadie te eche de menos.
A veces tenemos un pie ahí... al borde de algo que tan sólo tenemos que rodear, saltar, esquivar. Son obstáculos que nos impiden seguir adelante con nuestras vidas o con lo que sea que queramos hacer, bueno o malo, terrible o peor.
Yo no sé si hubiera pasado la pierna sobre la baranda. Tengo sueños, todavía los conservo. Me gustaría saltar en paracaidas, por ejemplo. Siempre he sido muy tranquilo, pero siempre he vivido al límite. Sí, también he sido muy contradictorio.
Es fácil verlo todo desde arriba. Te asomas tras esos barrotes decorados con un arte demasiado elaborado. Sabes que estás a salvo. Pero también sabes que si te sientas al borde del murito, corres peligro. Puedes caerte, hacerte daño, morir.
Y morirse es una putada para los demás. Para quienes te acompañan en este viaje por el mundo absurdo de las fantasías de otros y tus sueños negados y violados.
Pero aún así, ya digo; me gusta soñar.
No tener pesadillas, como estos últimos meses, en los que cada momento despierto o dormido, en mi mundo real o en el onírico han sido tormentosos. Pero no como esas tormentas en las que te quedas en casa, enciendes la chimenea y oyes la gotera de la cocina mientras la lluvia golpea con fuerza los árboles que rodean tu casa. Es como una tormenta en mitad de un océano y vas subido en una barca pequeña, al descubierto. Es una de esas tormentas en las que deseas hundirte con los pedazos de madera que te mantienen a flote.
Esa es la diferencia entre apoyarte en la barandilla o pasarte al otro lado, balancearte confiando en la fuerza de tus dedos, que se aferran al ladrillo viejo y gastado. Cerrar los ojos y dejarte caer, confiando que alguien te recoja, o que nadie te eche de menos.
It doesn't get much worse than this
In beds in little rooms in buildings
in the middle of these lives
which are completely meaningless
Help me stay awake, I'm falling...
In beds in little rooms in buildings
in the middle of these lives
which are completely meaningless
Help me stay awake, I'm falling...
Te pongas como te pongas, yo sé que te falta un "temiendo" delante del "o" de la última frase ;)
te has tomado lo de editora muy en serio eh! jaja la verdad es k tienes razon. un "temiendo" ahi kedaria genial ^^
Esto, más que por palabras equivocadas, iba por imagen equivocada XDD
pero prefiero el sentido que le doy con: confiando
De eso hablaba yo, del sentido que quieres darle.
Siempre va a haber alguien que te eche de menos, incluso alguien en quien nunca has reparado :)
Parto de la premisa de que me dan miedo las alturas. Cada vez que veo un murete o una barandilla, pienso que si tropezara, acabaría cayéndome por encima para aterrizar al otro lado, muchos metros más abajo. No puedo evitar el pensamiento.
Por cierto, soy de Cáceres. Lo pone en mi blog.
son esas personas las que al final siempre consiguen retenernos en lugares en los k no nos apetece estar, Soñadora ^^
Ardid, yo antes tenia miedo a las alturas. era mi unica fobia. ya no se como ni porque pero la he perdido!! ^^