la herida



Cada vez que presiono la herida aparece una mezcla de sangre infectada por algún resquicio que se abre en la postilla. Ha dejado de doler y dejará cicatriz, pero hay días en los que me tengo que rascar alrededor para aliviarme.

En ocasiones estoy tan tranquilo, con los amigos, y alguien despistado la golpea. Sé que es sin querer, pero vuelve ese dolor y recuerdo que sigue ahí, curando, la herida que por unos instantes la música y el alcohol me habían hecho olvidar.

Mi horizonte está plagado de nuevas caidas y grandes golpes, pero ninguno como el que lleva un año para cerrar. La que he tratado de cubrir con parches, siempre poco eficaces, siempre poco acertados. Porque me estaba curando en una habitación a oscuras y tenía anudadas las manos.

Aunque quiera rebentar mi barca contra las rocas, lejos de la costa, seguiré a merced de las olas en este bote desvencijado que hace aguas. Quizá la sal de Océano sane lo que no pueden brazos y entrepiernas doctos en este mal.

Me dicen que pase página... Igual que tú la has pasado tan rápido. Igual que me has olvidado, igual que crees sentir por él lo que creiste sentir por mí.

Tú no naciste para amar, sino para ser admirado, como una estatua absurda que cuando la tocas te percatas de que está hecha de un material que se oxidará. Tú, mentiras y vodka. Tú, falsedad cubierta de gloria. Ahora lo tienes fácil porque te arropan los de tu especie, pero ¿qué ha pasado con quienes dejaste atrás? ¿Cual es la parte de realidad que conocen de ti? ¿No te sientes como un fraude somnoliento por la inercia y la ilusa felicidad que te da la bebida? ¿Alguna vez pensaste de verdad que eras la persona que quieres ser y no una madeja que se deshace rodando por el suelo, recibiendo patadas de uno y otro hasta ver en qué pie acaba y qué zapatos se aburren antes de ti?

A primeros de la próxima semana hará un año que me dispararon. La madrugada del 6 al 7 fuiste todo lo que odiabas y me hiciste odiar todo en lo que había creido. Todo cuando había amado.

Y la herida no se cierra. Es cierto, si la aprieto salen sangre y pus. Y si aprieto más, si me olvido mis pastillas, brota también el veneno de aquel último "te amo" que me creí, tal día como hoy. Hace ya un año.

Comments (4)

Mientras malgastes un sólo segundo pensando en ésa persona jamás podrás olvidarla.
Mientras malgastes un sólo segundo pensando en ésa persona ó en los momentos que estuvisteis juntos, nunca pasarás página.
Cierra el libro, enciende una hoguera y echalo al fuego.
Mira hacia delante, la cabeza alta,tienes toda una vida por delante y otras personas te esperan, no eches la mirada atrás, ni siquiera de reojo.
Sal ahí fuera y ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡cómete el mundo!!!!!!!!!!!
Besos.

Sinceramente, no sé que decir. Beijinhos.

Canija propone fuego purificador, yo estoy de acuerdo, pero sólo porque todo lo que tenga que ver con el fuego es bueno, ¡haha!
Pero pongámonos serios: a todos nos ha pasado, tarde o temprano hay que atravesar baches, momentos que realmente cuesta olvidar o superar. Echarle huevos, como quien dice, y seguir adelante. Es la clave. Y no hace falta que te des prisa, cada quien tiene su ritmo, forzar la maquinaria no es bueno.
Como siempre, la redacción es impecable. Bravo, bravo por los que, como tú, saben hacer de todo un arte.
Un abrazo, nos leemos.

ainss muchísimas gracias a las 3 por los comentarios!!!! *________* me motivais a seguir escribiendo mis chorradas, de verdad. GRACIAS!!!